Introducción
Hemos creado este pequeño apartado debido a la relación cercana e intensa que existe entre la literatura y la mitología con la astronomía y la observación celeste. No encontraréis de momento muchas opiniones personales, pero sí una pequeña muestra de citas o dichos que junto con otros que están repartidas por la web, configuran nuestro interés por acercaros a la sensibilidad de varios autores literarios que tan profundamente y fácilmente saben expresar sus sentimientos y admiración ante la belleza del firmamento.
Entre los pasajes que más nos han impresionado figura la carta del 21 de julio de 1941 de Simone Weil a Antonio Atarés, refugiado aragonés en Djelfa, Argelia, en plena II Guerra Mundial. Hemos incluido un fragmento en el que Simone Weil expresa a Antonio la alegría que siente, en una noche serena, contemplando el firmamento con tal concentración que las estrellas parecen entrar en el alma. Los dos refugiados nunca se llegaron a conocer personalmente, y esta experiencia que comparten por carta, en el exilio, pone de manifiesto tanto la enorme atracción que la bóveda celeste puede generar, como la fortaleza extraordinaria de ella, para ser capaz de abstraerse de ese contexto de pleno conflicto armado.
1. Referencias bibliográficas literarias

Ibn Hazm de Córdoba (994-1064)
«Pastor soy de estrellas, como si tuviera a mi cargo
apacentar todos los astros fijos y planetas.
Las estrellas en la noche son el símbolo
de los fuegos de amor encendidos en la tiniebla de mi mente.»
Parece que soy el guarda de este jardín verde oscuro del firmamento,
cuyas altas yerbas están bordadas de narcisos.
Si Tolomeo viviera, reconocería que soy
el más docto de los hombres en espiar el curso de los astros.»El collar de la paloma «Sobre las señales del amor»
Ibn Hazm de Córdoba (Córdoba 994-1064)
«Le petit prince s’assit sur une pierre et leva les yeux vers le ciel :
Je me demande, dit-il, si les étoiles sont éclairées afin que chacun puisse un jour retrouver la sienne. Regarde ma planète. Elle est juste au-dessus de nous… Mais comme elle est loin ! »
Chapitre XVII
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«De esta manera supe una segunda cosa muy importante: su planeta de origen era apenas más grande que una casa.
Esto no podía asombrarme mucho. Sabía muy bien que aparte de los grandes planetas como la Tierra, Júpiter, Marte, Venus, a los cuales se les ha dado nombre, existen otros centenares de ellos tan
pequeños a veces, que es difícil distinguirlos aun con la ayuda del telescopio. Cuando un astrónomo descubre uno de estos planetas, le da por nombre un número. Le llama, por ejemplo, «el asteroide 3251″.
Tengo poderosas razones para creer que el planeta del cual venía el principito era el asteroide B612. Este asteroide ha sido visto sólo una vez con el telescopio en 1909, por un astrónomo turco.
Este astrónomo hizo una gran demostración de su descubrimiento en un congreso Internacional de Astronomía. Pero nadie le creyó a causa de su manera de vestir. Las personas mayores son así.
Felizmente para la reputación del asteroide B 612, un dictador turco impuso a su pueblo, bajo pena de muerte, el vestido a la europea. Entonces el astrónomo volvió a dar cuenta de su descubrimiento en 1920 y como lucía un traje muy elegante, todo el mundo aceptó su demostración.»
Capítulo IV
El Principito
Le Petit Prince – Antoine de Saint-Exupéry
Fragmento de la Carta de Simone Weil a Antonio Atarés, el 21 de julio de 1941, extraído del libro La Amistad Pura de Domenico Canciani y Maria Antonietta Vito sobre Simone Weil.
«Te agradezco que me hayas contado tu vida cotidiana. ¿ Recuerdas aún los pájaros del Pirineo ? No sé si el silencio no será el más bello de todos los cantos. En un paisaje grande, a la puesta o a la salida del sol, no hay una armonía más plena que la del silencio. Aunque los hombres hagan ruido alrededor, se puede oír el silencio que desciende de lo alto y se dilata en lontananza como el cielo. Me alegro de que puedas disponer de agua pura: el agua pura es algo bello. Las noches deben ser muy luminosas y llenas de estrellas en Àfrica. ¿ Las miras con frecuencia ? ¿ Las conoces ? Platón decia que la vista es verdaderamente preciosa sólo porque nos permite conocer ls estrelllas, los planetas, la luna, el sol. En cuanto a mí me avergüenza decir que casi no conozco las constelaciones y sus nombres. Hace unos meses, me he procurado un mapa del cielo para poner fin a mi ignorancia. Pero no lo he estudiado, porque luego he comprendido que no necesito libros para contemplar el cielo y puedo, observándolo mucho, llegar sin ninguna ayuda a identificar las constelaciones y los movimientos del cielo, como los pastores que han inventado la astronomía hace miles de años. No hay para mí mayor alegría que mirar el cielo en una nocha clara, con atención tan concentrada para disipar cualquier otro pensamiento; entonces se podría pensar que las estrellas entran en el alma.»
Simone Weil, 8, Rue des Catalans, Marsella – 21-7-1941
Está el cielo tan bello,
que parece la tierra.
(Dan ganas de volver
los pies y la cabeza.)Poema Un Clima de Juan Ramón Jiménez
«Fue Julio Verne quien me decidió a la astronáutica»
Yurin Alekséievich Gagarin. (Klúshino 1934 – Moscú 1968)
La Primera Órbita Terrestre – Yuri Gagarin – 1h 39′ 15″
50 Years of Humans in Space – 50 Años del Hombre en el Espacio – 5’58»
“Qué gran libro se podría escribir con lo que se sabe. ¡Otro mucho mayor se escribiría con lo que no se sabe!”
Jules Verne (Nantes 1828 – Amiens 1905)
2. Mitologia
En un futuro próximo iremos desarrollando este capítulo de una forma ordenada.